La fiebre es uno de los principales síntomas que causa la COVID-19 junto a los problemas respiratorios. Por ello la detección de fiebre se ha convertido en una de las principales maneras de detectar posibles personas contagiadas.Así la detección de fiebre se realiza en aeropuertos, establecimientos comerciales y lugares públicos con gran afluencia de personas como manera de garantizar la seguridad y detectar posibles focos de contagio.
Y debido a la importancia de la detección de fiebre, tanto a nivel público o social como personal, en este artículo vamos a hablar de los principales métodos o aparatos para medir la fiebre.
· Termómetros de mercurio
Los termómetros de mercurio son el aparato tradicional para la detección de la temperatura corporal. Estos termómetros son una especie de tubo de cristal con una escala de la temperatura. Dentro del propio tubo de cristal hay mercurio, que se dilata y crece con el calor por lo que marca la temperatura corporal.
A pesar de que uso es muy común, los expertos recomiendan otro tipo de termómetros, ya que el mercurio es tóxico y causa graves problemas de salud.
· Termómetros electrónicos
Los termómetros electrónicos son el aparato más recomendado para uso personal. Suelen tener una pantalla en la que tras colocarse el aparato aparece la temperatura corporal registrada. Los termómetros se pueden poner para registrar la temperatura en la boca o la axila e incluso el recto.
Es importante señalar que si el aparato es de uso familiar hay que desinfectarlo tras su uso. Y no solo por el coronavirus, sino por otras bacterias y gérmenes que pueden ser vector de contagio de cualquier enfermedad. Y es que hay que recordar que este aparato se suele utilizar al encontrarse mal o padecer cualquier enfermedad. Por lo que no te olvides de desinfectarlo tras cada uso.
· Termómetros de tira plástica
Otro tipo de termómetro son los de tira plástica. Este tipo de aparato es una cinta o tira plástica que se debe colocar en la frente y tras el paso de un minuto cambia de color mostrando la temperatura registrada. También algunos termómetros de tira plástica se pueden poner en la boca. No obstante, hay que señalar que según los expertos son un aparato poco preciso, por lo que es más recomendable el uso de otro tipo de termómetros.
· Termómetros infrarrojos
Los termómetros infrarrojos se han convertido en la forma más fiable de medir la fiebre por la pandemia de coronavirus, ya que se puede detectar la temperatura corporal sin contacto directo. Este tipo de aparatos funcionan mediante la emisión de un haz de luz de cuerpo negro que mide la temperatura corporal. El infrarrojo se suele lanzar o poner en la frente, pero también algunos registran la temperatura en las muñecas.
Lo que está claro que al poder detectar la fiebre sin contacto directo con el aparato facilita la labor de rastreo y no hay que desinfectar constantemente el aparato. También son muy cómodos y útiles para los niños, ya que no suelen aguantar el tiempo oportuno con otros termómetros pero no hay problemas con los termómetros infrarrojos.
· Cámaras termográficas
Y otro aparato muy útil que se está utilizando mucho en espacios públicos son las cámaras termográficas. “Las cámaras térmicas toman radiación infrarroja de los objetos por encima de la temperatura absoluta de 0 K. Posteriormente crean crean imágenes y obtienen valores de temperatura. Gracias a estas imágenes y valores se puede detectar qué persona tiene temperatura alta entre un amplio grupo de personas. Son muy útiles para realizar un primer cribado para hacer más pruebas”, explican desde Ibertrónix Infrared & Vision S.L, empresa especializada en la medición de temperatura mediante sistemas termográficos y pirómetros infrarrojos.
Sobre las cámaras térmicas hay que señalar que existen dos tipos diferentes, las cámaras térmicas portátiles y las fijas, cada una de ellas funciona de manera diferente y cuenta con unas características diferenciables.
Las cámaras térmicas portátiles facilitan a los usuarios la posibilidad de moverse de un lugar a otro para poder detectar la fiebre. No necesitan que la cámara esté conectada a ningún aparato externo, como ordenadores, y la temperatura se puede leer de manera muy sencilla.
Mientras que las cámaras térmicas fijas permiten la lectura correcta de la temperatura corporal a una distancia de 2 metros y establecen hasta cuatro puntos de temperatura dentro de la termografía. Se suelen utilizar en hoteles y establecimientos comerciales con gran afluencia de público. Como principal inconveniente es que este tipo de cámaras deben estar conectadas a un ordenador.